La lentitud, principal queja en la descarga del sistema iOS 7.

Que millones de personas quieran descargarse 700 megas a la vez no es tarea fácil; pero, salvo pequeñas incidencias en la hora punta (10 horas del miércoles en California, EE UU), los primeros chequeos indican que las quejas son mínimas y casi todas por la tardanza en realizarse la descarga completa del nuevo sistema operativo iOS 7 de Apple.
A pesar de ser una actualización pesada, de casi un giga (728 megas), ese es un problema menor en Japón.
Una conexión japonesa de 45 megas de bajada de media hace que los archivos se guarden en el teléfono en cuestión de minutos.
La dificultad llega a la hora de instalarlo. Entonces sí es necesario tener paciencia. Después de cinco intentos, el iPhone consiguió conectar con los servidores de Apple para verificar la actualización.
Un reinicio, otro, cambio de color de la pantalla. Ya no hay una manzana blanco sobre fondo negro durante la renovación del sistema operativo, sino una traslúcida sobre fondo blanco. Una vez reiniciado el teléfono, hay que dar las claves de seguridad.
De inmediato se recibe un correo con las mejoras del servicio ‘Find my iPhone’, en el que se usa cuando se extravía el móvil.
En lo sucesivo tendrá novedades, además de poder desactivar esa aplicación a distancia (por si un amigo de lo ajeno consigue desbloquear el móvil y lo quita), se puede borrar el móvil o reactivarlo en caso de recuperación.
Hasta ahora si el móvil volvía a su dueño, tenía que volver a empezar de cero y después tomar los datos desde iCloud, la nube de Apple.
De este modo resulta algo más cómodo si se está ante una falsa alarma. La pantalla principal pierde parte de su orden.
Apple vuelve a poner por su cuenta Facetime, su equivalente a Skype, en la primera ronda de aplicaciones, por lo que hay que pasar unos segundos poniendo orden para volver a sentirse cómodos con el móvil.
