Los Yankees pierden a Severino

Diagnosticado con daños en el ligamente del codo derecho, el dominicano será sometido a una cirugía “Tommy John”. Es la continuación de lo que ha sido un período de alrededor de un año tremendamente desafortunado para los Yankees en materia de lesiones.

La ausencia de Severino erosiona la rotación del conjunto, que para 2020 será encabezada por Gerrit Cole. Los únicos otros sembrados para el inicio de la estación son Masahiro Tanaka y J.A. Happ.

La gerencia del conjunto piensa apelar a su profundidad organizacional para suplir las ausencias. Los nombres más importantes en este proceso son el tirador zurdo Jordan Montgomery, el prospecto dominicano Deivi García, Jonathan Loaisiga y Luis Cessa. Otros a tomar en cuenta: el veterano Chad Bettis y los jóvenes Clarke Schmidt y Mike King.

El dirigente Aaron Boone también puede utilizar a Chad Green como “opener”, alternativa empleada en 15 ocasiones el año pasado. Por la profundidad de su bullpen, los Yankees pueden darse ese lujo cada cinco días por lo menos hasta que Germán reaparezca en junio. Montgomery ha causado buena impresión en su regreso de una cirugía en el codo.

En 2017, tuvo PCL de 3.88 en 29 aperturas con nueve victorias. García, por su parte, es el prospecto número uno de la organización de acuerdo a MLB Pipeline, gracias a una curva mortal, una bola rápida que toca 96 mph y la serenidad de un veterano. Puede que sean los dos principales candidatos de un grupo bastante nutrido.

El año pasado, los Yankees ganaron 103 partidos sin Cole y prácticamente sin Severino ni Dellin Betances. Gracias a su explosiva ofensiva (306 cuadrangulares, 943 carreras anotadas y WAR de 32.7 en 2020) y al mejor bullpen del béisbol en los últimos años, no nos causaría sorpresa que logren repetir como campeones de su división.

La interrogante es cómo regresará Severino, quien venía enfrentando contratiempos desde la segunda mitad de la temporada de 2018. A su favor tiene la juventud y atlética contextura física.

Esperamos verlo regresar con su bola rápida cerca de 100 mph y excelente arsenal de lanzamientos secundarios que le permitieron terminar en el “Top 10” en las votaciones por el premio Cy Young en 2017 y 2018.