¿Cómo actuar cuando tu pareja está desempleada?
La crisis económica se está convirtiendo en uno de los grandes venenos para las parejas, desequilibrando una estabilidad alcanzada gracias a una buena posición económica que impulsa parte de los proyectos de cualquier relación. A ello le sumamos el factor psicológico y emocional del integrante despedido, cuyo sufrimiento te contagiará de un modo u otro. Sin embargo, quizás no esté todo perdido y puedas obtener grandes ideas tras saber la respuesta a esta usual pregunta: ¿cómo actuar si mi pareja está desempleada?
LO QUE NO HAY QUE DECIR
Todo parece ir bien: dos empleos, un hogar, pequeños proyectos a realizar durante el nuevo año y, en el caso de algunos, hijos a los que sustentar. El problema llega cuando tu pareja llega un día a casa y, tras muchos días de posible tensión reprimida, te comunica que ha sido despedido. En otras ocasiones, dos personas se conocen e inician una relación aún sosteniendo una precaria situación económica.
Sea cual sea la situación, el problema de la falta del dinero tras ser despedido o rechazado por muchos empleos se traduce en una rabia e impotencia que se debe paliar a tiempo para que no se convierta en un mal mayor. Porque tras el golpe, vienen otros problemas derivados: incapacidad para pagar la hipoteca, para tener algo de ocio (algo que siempre ayuda a cualquier pareja), pedir préstamos a familiares o amigos y un largo etcétera de situaciones indeseables que pueden hundir aún más a la pareja si el timón no es movido con firmeza y en una sola dirección.
En primer lugar, debes olvidarte de las típicas frases esperanzadoras tipo “todo saldrá bien” o “no te preocupes”, debes dejarlas para más tarde. Está comprobado que cuando alguien acaba de recibir una mala noticia y está enojado por ello, no busca consuelo, sino empatía, ver que esa otra persona trata de ponerse en la piel y compartir el dolor maldiciendo a ese jefe o dándote la razón. Eso crea una mayor fortaleza en lugar de la impotencia que supone en ese momento cualquier frase conciliadora. Una vez compartida esta situación, será el momento de dejar atrás la negatividad y centrarse en una solución en la que, por supuesto, se necesita la colaboración entre los dos integrantes.
CÓMO APOYAR AL OTRO
Si tu situación laboral aún marcha bien, tienes que centrarte primero en ver qué puede hacer tu pareja desempleada a corto plazo: contactos, cartas de motivación a la competencia, prestaciones de desempleo, etc… Comprobar la economía familiar será otro factor a la hora de acelerar las prioridades.
Tu apoyo siempre será importante, pero también tienes que permitirte un espacio para saborear tus pequeños triunfos o tu momento de relajación, pues sino te verás arrastrada a una espiral de frustración incluso mayor que la de tu pareja. Permítele unos primeros días para tener su propio duelo, que se relaje y pueda disfrutar un poco de esas actividades que le gustan, continuado con la búsqueda de empleo anteriormente mencionada y, posteriormente, pasar a una planificación económica ante la que habrá que tomar medidas si tu pareja no ha encontrado trabajo.
Durante todo el proceso, procura estar a su lado, motivarle a encontrar algo mejor y convencerle de que “todo pasa por algo” y que posiblemente esta sea la oportunidad para retomar otras actividades, centrarse en trabajar en algo que realmente le gusta, impulsar esas dotes artísticas que siempre dejó a un lado; todo ello mientras compruebas que él no ha perdido la motivación por seguir buscando empleo, que puedes sostener la economía o haya prestaciones de desempleo de por medio que ayuden medianamente a paliar el temporal.
Lo que no puedes permitir es que entre en una espiral de acomodamiento y tristeza, que su negatividad le impida abandonar el rencor y seguir hacia adelante.
Cómo actuar cuando la pareja está desempleada es una pregunta que muchas personas nos hacemos en estos turbios tiempos de desempleo, despidos e incertidumbre laboral. Sin embargo, como todo gran suceso en cualquier pareja, dependerá de nosotros en un primer momento y, poco después, de la cooperación entre los dos integrantes. Solo así será posible llegar a buen puerto que, de alcanzarlo, aumentará la estabilidad emocional de la relación.