Reales optimistas pese a revés.
Los Reales de Kansas City están convencidos de que lo mejor está aún por venir.
Los flamantes campeones de la Liga Americana perdieron en siete partidos el Clásico de Otoño con un equipo joven, por el que muy pocos, si es que alguien, apostaba cuando comenzó la temporada.
"Tremendo futuro tenemos por delante", dijo el segunda base venezolano de los Reales, Alcides Escobar. "Tenemos el talento para llegar de nuevo a otra Serie Mundial. Y vamos a seguir luchando".
Escobar recordó que estos Royals representaron a un equipo que llegaron al último partido de una Serie Mundial desde el partido de comodines. "Este es un grupo de muchachos que estará unido por mucho tiempo", agregó. "Tenemos el futuro por delante".
Salvo el lanzador James Shields y el bateador designado Billy Butler, de 29 años, que ha pasado todas las siete temporadas de su carrera con los Reales, el resto del equipo tiene la permanencia asegurada en el mediano plazo.
"Pero de cuaquier manera tendremos decisiones difíciles qué hacer", dijo el gerente general Dayton Moore. "Continuaremos añadiendo jugadores que embonen con nuestras ideas, filosofía y química en el clubhouse".
"Hoy duele perder", agregó. "Pero también hay que estar convencidos de que esta fue sólo otra lección más camino a cumplir las metas que hemos trazado".
El pitcher abridor del séptimo juego Jeremy Gunthrie, quien sufrió la derrota este miércoles, coincidió con que el equipo tiene futuro positivo por delante.
"Tenemos el talento y la experiencia ahora de postemporada", dijo. "Tenemos que trabajar más duro para cumplir la meta. No será fácil. Son 162 juegos de temporada y los playoffs. Muchas cosas pueden pasar".
"Pero esta puede ser la base de muchas cosas que están por venir", agregó. "Creo que podemos volver y hacer la carrera completa".
Los ahora campeones de las Grandes Ligas, los Gigantes de San Francisco , consideraron que sólo el cielo es el límite para los Reales, si trabajan de una manera similar al del 2014.
"Si este equipo se mantiene unido, con humildad y dando su máximo esfuerzo, van a dar mucho de que hablar", dijo el jardinero Gregor Blanco. "Hay que darles su mérito. Nunca se rindieron y la única diferencia fueron algunas jugadas, algunos pitcheos, algunos batazos, que pudimos hacer y ellos no"
. El manager de los Reales, Ned Yost, dijo que la experiencia conseguida en los últimos dos meses de temporada será vital en sus aspiraciones.
"El año pasado, al final de la temporada, pensé que ojalá pudieran estos muchachos dar el salto al siguiente nivel", recordó. "Ahora ya no se trata de tener esperanza, ya son una realidad. Son peloteros del siguiente nivel".
"Lo mejor es que aún están muy hambrientos", agregó. "Adentro del clubhouse hay un grupo desanimado por completo de jugadores porque sienten que no cumplieron el objetivo. Y eso los motivará a trabajar aún más".