Unas gafas para invidente traducen el mundo visual a sonidos
Una spin-off del Centro de Investigación de Tecnologías Gráficas de la Universidad Politécnica de Valencia (UPV), Grupo EYE2021, está desarrollando unas gafas de realidad aumentada para invidentes. Su principal función es traducir a sonidos el mapa tridimensional de lo que tienen delante para que el usuario pueda navegar con mayor facilidad por su entorno.
Las gafas, denominadas EYE21, cuentan con unas microcámaras que registran lo hay frente al usuario —personas, paredes, columnas— y lo traducen a sonidos. «Lo que hacen estas gafas es convertir las tres dimensiones en sonido», asegura Guillermo Peris, director y promotor de la idae. Su tecnología está inspirada en la ecolocalización, el sistema que permite a murciélagos, delfines y otros mamíferos desplazarse y cazar.
«Lo que nosotros ofrecemos es un sistema amplificador de la ecolocalización», afirma Peris. Para explicar el funcionamiento de sus gafas pone un ejemplo. «Cuando llueve, tu oyes como las gotas chocan contra el suelo, y gracias a esos sonidos eres capaz de crear una superficie —el suelo— en tu cerebro». Las EYE21 toman imágenes tridimensionales y las convierten en ‘clics’ que permiten a los usuarios saber qué tienen delante. Estos sonidos, dice el responsable del proyecto, van por un canal distinto al de la voz hablada, por lo que no interfieren con las conversaciones. Aun así, reconoce, «los milagros no existen», y sentencia que no son un sustituto, sino «un complemento del bastón». «Pueden identificar que vienen cinco personas de frente, y donde está el hueco», explica, pero pasar por alto una alcantarilla sin tapa si el usuario no la 'mira'.
Aunque ya están desarrollando la tercera versión de las gafas —la que saldrá a la venta—, Peris asegura que están buscando financiación para poder fabricarlas y distribuirlas de manera comercial. «Esperamos que sea antes de finales de 2013», dice. Su comercialización se llevará a cabo a través de internet y de otros servicios especializados.
Reconocimiento facial y videollamada
Las EYE21 cuentan, además de con el sistema de ‘ecolocalización’, con otras funciones para hacer más fácil la vida de los invidentes. Incorporan tecnología de reconocimiento facial, para que el usuario pueda saber a quién tiene delante, y de identificación de objetos para facilitar su búsqueda en caso de despiste.
Incluso cuentan con la posibilidad de realizar videollamadas que permitan al interlocutor ver lo que tiene delante el usuario, y guiarlo en tareas difíciles, o simplemente cuando se encuentra en un lugar desconocido. También incorpora un módulo de reconocimiento de texto que puede leer al usuario los caracteres que tenga delante.
La autonomía de las gafas, que contarán con «un procesador muy potente», se sitúa entre las 6 y las 8 horas. Los ‘clics’ y el resto de sonidos se transmiten al usuario a través de auriculares.
Además de las funciones que ya incorporan, Peris asegura que quieren facilitar que terceras personas desarrollen software para las gafas, que permita incorporarles nuevas capacidades.
Entre los futuros proyectos de Grupo EYE2021, que en un par de años ya ha recibido cinco premios por su idea, está el desarrollo de unas gafas de realidad aumentada pensadas para personas con baja visión, que les permitan desenvolverse con mayor soltura.