5 claves para ser una mujer exitosa en el 2014

Ser exitosa es el sueño que más de una mujer tiene para el 2014.
No solamente se trata de ser exitosa como profesional, sino también de serlo en otros aspectos como el familiar, el personal y el sentimental. Por ello, hoy la coach personal, Sandra Mateus, nos cuenta algunas claves para llegar a ser esa mujer que tienes en mente desde hace tiempo.
¡Ha llegado el momento! ¿Preparada?
1 - Éxito en todo
El éxito es un conjunto. No se puede ser exitosa en materia profesional y ser un verdadero desastre en la vida personal. Tal vez el equilibrio es la clave más importante.
La recomendación es buscar ese equilibrio en todas las áreas de la vida. Para Mateus es claro que “En el momento en que sacrifiquemos un área de la vida por otra, comenzamos a flaquear”.
2 - Ser una mujer con visión
Una mujer exitosa tiene claro qué quiere. Muchas mujeres tienen un objetivo en la vida que se concentra en una misión.
Tendrás que fijar un propósito en tu vida, ¿ya lo tienes? Bien, es momento de avanzar hacia él con visión, es momento de pensar en grande.
3 ¿Ya sabes cuáles son tus fortalezas y debilidades?
Ninguna mujer sabe lo que tiene sin saber de lo que carece. “La clave es ser consciente de tus fortalezas y debilidades, así podrás potenciar las primeras y trabajar en las segundas”, asegura Mateus.
Es hora de trabajar en aquellas debilidades, lo importante es darse cuenta a tiempo de cuáles son.
4 - ¿Mujer súper poderosa?
Para Mateus sucede: “A veces nos creemos el cuento de que somos autosuficientes, la mujer ‘súper poderosa’ que puede con todo y que no necesita de nadie y menos de hombres”.
Pero se trata de un error, ya que todos somos seres sociales. ¡Recuerda! Pedir ayuda no es malo.
5 - La que persevera, alcanza
Quizás uno de los aspectos que tengan en común mujeres y hombres exitosos es algo que llamamos perseverancia. No rendirse es la mejor forma de alcanzar un objetivo.
Una y otra vez te enfrentarás a obstáculos. Lo ideal será afrontar el fracaso como un error del cual aprender y no como una tara inmanejable. Una mujer exitosa no dirá: “Todo me sale mal” o “No volveré a intentarlo”.
