¿Por qué los Oscars 2013 pueden ser históricos?
Si en los Oscar de este año Argo, el film de Ben Affleck, se acaba llevando el gato al agua en la categoría de mejor película (como empiezan a apuntar muchos pronósticos) no será la primera vez que una cinta se lleva el Oscar más codiciado sin tener a su director nominado. La última vez que ocurrió algo así fue en 1989 con Paseando a Miss Daisy, cuyo director, Bruce Beresford, no aspiró a la estatuilla. Según esta hipótesis, Argo se quedaría bastante cerca de sentar un precedente histórico en los premios de la Academia de Hollywood. Pero entonces la pregunta que nos surge es: ¿pueden los Oscar de este año ser históricos? ¿Puede darse alguna situación inédita en la historia de los galardones? Pues sí las hay y las repasamos a continuación de la mano de la web Moviefone. ¿Qué mejor manera de calentar motores de cara a la ceremonia que se celebrará el próximo día 24?
Empecemos analizando los posibles Oscar “históricos” en las categorías actorales. Por ejemplo, sí Daniel Day-Lewis acaba llevándose el Oscar al mejor actor protagonista por su trabajo en Lincoln, se convertirá en el único intérprete que ha vencido en tres ocasiones en esta categoría. En la actualidad, Jack Nicholson ostenta el récord de victorias con tres premios, pero uno de ellos fue en la categoría de mejor actor de reparto (en 1983 por La fuerza del cariño). Siguiendo con Day-Lewis, el actor londinense podría convertirse en el primer actor escarizado por interpretar a un presidente americano. Raymond Massey fue nominado por su trabajo en Lincoln en Illinois, la película de 1940, mientras que Henry Fonda no fue siquiera nominado por su papel en El joven Lincoln, el film de John Ford de 1939. Por su parte, Anthony Hopkins y Frank Langella fueron ambos nominados por encarnar a Richard Nixon, respectivamente en Nixon, de Oliver Stone, y El desafío – Frost contra Nixon, de Ron Howard. Por su parte, tanto el Petter Sellers de Teléfono rojo, volamos hacia Moscú como el Jeff Bridges de Candidata al poder (The Contender) fueron nominados por interpretar a presidentes ficticios, pero ninguno de ellos se alzó con el premio. En el bando femenino, podría pasar algo parecido si Sally Field se llevara el Oscar a la mejor actriz secundaria por su trabajo en Lincoln: nunca antes una actriz ha sido recompensada con el Oscar por interpretar a una Primera Dama (Joan Allen fue nominada por su papel de Pat Nixon).
Siguiendo con las categorías actorales, nos encontramos con los casos opuestos de la francesa Emmanuelle Riva y la norteamericana Quvenzhané Wallis. Si Riva se lleva el Oscar a la mejor actriz por su papel en Amor se convertiría a sus 85 años en la actriz más veterana en llevarse un Oscar (Jessica Tandy, que lo ganó a los 80 por Paseando a Miss Daisy conserva el récord). Mientras que si la suerte cae del lado de Wallis por su papel en Bestias del sur salvaje, se convertiría, a sus 9 años, en la actriz más joven en triunfar en la categoría de mejor actriz protagonista (ese récord lo ostenta Marlee Matlin por su trabajo en Hijos de un dios menor). Para rematar el panorama histórico que podríamos encontrar en estas categorías, observamos que si los cuatro actores nominados de El lado bueno de las cosas se llevasen a casa sus respectivos Oscar sería la primera vez que esto ocurriese en los premios de la Academia de Hollywood. Entre las otras películas que lograron nominaciones en las cuatro categorías actorales, Un tranvía llamado deseo y Network, un mundo implacable se alzaron con tres galardones.
Y ahora saltamos a una de nuestras categorías favoritas: la del largometraje de animación. Si Frankenweenie se alza con el premio, se convertiría en la primera ganadora realizada con la técnica de stop-motion y no producida por Aardman Studios. La novia cadáver de Tim Burton fue nominada en el año 2006, pero perdió contra Wallace & Gromit. La maldición de las verduras. Por su lado, si ganase Brave (Indomable), la película de Disney-Pixar, su codirectora Brenda Chapman se convertiría en la primera mujer en ser premiada en esta categoría.
Saltando a la categoría de mejor director, encontramos el caso de Behn Zeitlin. El joven realizador de Bestias del sur salvaje podría convertirse, a sus 30 años, en el director más joven en alzarse con la estatuilla. Sin embargo, no estamos ante el director más joven en ser nominado: John Singleton lo logró con 24 años por Los chicos del barrio. El ganador más joven fue Norman Taurog, que en 1931 ganó el Oscar por la comedia Skippy cuando tenía sólo 32 años. Luego, en la categoría mayor, la de mejor película, descubrimos que Amor podría convertirse en la primera película de habla no inglesa en alzarse con el Oscar más preciado. The Artist tenía producción francesa, pero nadie hablaba en la película. Lo mismo ocurrió con El pianista (que coronó a Adrien Brody como mejor actor y a Roman Polanski como mejor director): fue producida por compañías francesas, pero era hablada mayoritariamente en inglés.
Y para acabar, un pequeño apunte de corte racial: si Denzel Washington gana en la categoría de mejor actor protagonista se convertiría en el primer actor afroamericano en lograr dicha hazaña. De hecho, con su nominación por El vuelo, Washington ya ha sentado un nuevo record: en su currículum ya constan seis nominaciones y dos victorias (por Tiempos de gloria y Training Day), más que ningún otro actor afroamericano en la historia de los premios Oscar.