Gerard Piqué se refugia con Shakira en Los Ángeles.
El mediático futbolista catalán, Gerard Piqué, es uno de los pocos jugadores de la selección española que ha desaparecido por completo de la esfera pública desde la dolorosa derrota de su equipo en la Copa Confederaciones y, a diferencia de muchos de sus compañeros, ni siquiera ha hecho acto de presencia en el perfil de Twitter que tanto había cultivado en los meses pasados.
Mientras que la crónica social se ha hecho eco de la boda a la que asistió recientemente Sergio Ramos con Pilar Rubio, de la escapada ibicenca de Carles Puyol y su novia Vanesa Lorenzo y --sobre todo-- de las vacaciones de Iker Casillas y la embarazada Sara Carbonero en las islas Seychelles; el prometido de Shakira ha logrado aislarse totalmente del radar mediático en uno de los lugares que parecen menos convenientes para ello: el famoso barrio angelino de Hollywood, donde el deportista comparte unos días de vacaciones con la estrella del pop.
La única imagen que ha logrado retratar a la pareja en su período de descanso estival se tomó recientemente cuando ambos abandonaban en coche un exclusivo restaurante de la ciudad, una instantánea que solo revela la comodidad con la que Shakira afronta la presencia constante de los reporteros gráficos y, al mismo tiempo, la irritación que genera en el guapo defensa la expectación que siempre les rodea. Si el serio rostro que exhibe el guapo defensa está relacionado o no con el sinfín de críticas y burlas que recibió tras la humillante expulsión que sufrió en la final del torneo es un tema que queda sujeto a interpretación, pero lo que está claro es que Piqué ha iniciado sus vacaciones con pocas ganas de seguir ocupando titulares en la prensa.
Por su parte, la felicidad que irradia la colombiana con su amplia sonrisa no solo se explica por su inherente optimismo o por la expectación que ha provocado el lanzamiento de su nuevo perfume, 'Elixir Wild', sino por la reciente victoria judicial que ha puesto fin --por el momento-- al largo enfrentamiento que mantenía en los tribunales con su expareja, Antonio de la Rúa. Aunque el hijo del expresidente argentino Fernando de la Rúa reclamaba a la cantante la astronómica cantidad de 100 millones de dólares en concepto de una supuesta colaboración profesional, un magistrado de Ginebra no solo desestimó recientemente la demanda por la que este reclamaba parte del dinero de la cuenta suiza de la artista, sino que obligó al argentino a indemnizar a la famosa vocalista así como a encargarse de todas las costas judiciales.
Aunque Shakira no se ha dejado ver levantando los brazos en señal de júbilo, los representantes legales que actúan en su nombre no han hecho ningún esfuerzo por disimular la satisfacción que les produce la sentencia. Calificando de "parásito" a de la Rúa y refiriéndose a su recurso judicial como una "vergonzosa" maniobra, el abogado suizo de la estrella del pop no se ha ajustado a los métodos comedidos y a la corrección política que siempre han definido a la colombiana, quien a pesar del chaparrón mediático que le ha caído durante todo el proceso legal, nunca ha dejado de sonreír ni de irradiar positivismo ante las cámaras; una actitud de la que bien podría aprender su malhumorada pareja, quien ha protagonizado más de una salida de tono ante los micrófonos de los periodistas.
"¡Vente un día con tu hermana y verás si soy maric** o no!", le espetó hace dos años a un reportero en medio de una polémica sobre unas malinterpretadas imágenes que le retrataban en actitud cariñosa con un compañero de equipo.