Convivir con el coronavirus: guía para contagiados y las personas que comparten domicilio
Imagina que te acaban de confirmar que tienes covid-19, pero que tu caso no requiere hospitalización. Según una guía de los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades de Estados Unidos, desde ese momento debes aislarte para no contagiar a otros y por lo tanto, no deberías acudir a lugares públicos, sea por trabajo o por diversión.
Una autoridad sanitaria debe determinar que estás en condición estable para recibir cuidados en casa. Se debe considerar si el paciente contará con una o varias personas que lo cuiden, una habitación independiente, de ser posible con baño privado y buena ventilación donde debe pasar la mayoría del tiempo, acceso a sus medicinas y material sanitario protector y por supuesto, provisiones.
Deberás estar separado de tu familia o de quienes convivan en ese espacio, con especial cuidado si son personas en grupos de riesgo, ya sea por su avanzada edad o porque tienen condiciones médicas previas o un sistema inmunológico débil.
Aunque no hay constancia de animales contagiados con el Covid-19, se recomienda evitar contacto con ellos. Medidas de protección Deberías llevar una máscara cuando te encuentres cerca de otras personas, sea en la casa, en la calle o en un vehículo. Si no pudieras portar esa máscara porque te molesta para respirar o por cualquier otro motivo, el resto de las personas debería colocarse una.
Mantén una distancia de al menos dos metros con el resto de las personas en la vivienda. Cúbrete la boca cuando tosas o estornudes y lávate las manos frecuentemente; recuerda: con jabón o desinfectante con base de alcohol y al menos durante 20 segundos.
No compartas vajilla ni toallas y limpia a menudo las superficies que más toques, como respaldos de sillas, superficies de las mesas, grifos, inodoros, interruptores, picaportes, controles remotos, teléfonos móviles, tabletas y accesorios de computadoras.
La ropa y las sábanas con restos de fluidos corporales deben ser recogidas con guantes y mascarilla y lavadas inmediatamente a una temperatura de 60 a 70 grados Celsius. No hay que mezclar la ropa del paciente con la del resto de los residentes de la vivienda. Desecha las mascarillas y los guantes desechables en bolsas cerradas y lávate las manos siempre después de realizar estas tareas.
Vigila tus síntomas, si se complican y necesitas asistencia médica, a domicilio, centro médico u hospital, notifique su condición de contagiado con el virus antes de que le atiendan.
Y recuerda dos cosas: según la Organización Mundial de la Salud, los enfermos que han superado el virus pueden todavía contagiar durante al menos dos semanas y, por lo tanto, el final de su aislamiento tiene que ser decidido por una autoridad sanitaria.