Remedios naturales y soluciones para no roncar
No es sólo un sonido que perturba en la noche. Roncar es un problema serio para quien lo padece y para su pareja. Además de perturbar el sueño, podría ser un signo de apnea obstructiva del sueño. Conoce las soluciones más sencillas y accesibles, y entétate cuándo debes consultar al médico.
En la mayoría de las personas, la razón del ronquido se desconoce. Algunas posibles causas pueden ser: tener sobrepeso, tener el tabique nasal torcido o deforme, por pólipos nasales, congestión nasal por resfriados o alergias, o padecer apnea del sueño, según la Biblioteca Nacional de Medicina de EE.UU.
Puede ser por cambios en la boca y la garganta como: hinchazón de paladar, de las adenoides o de las amígdalas, que obstruyen las vías respiratorias; por tono muscular bajo, lengua demasiado grande, huesos muy grandes de la cara, uso de alcohol, somníferos o antihistamínicos a la hora de acostarse.
Roncar puede ser un signo de este trastorno. Esto significa que hay períodos en los que dejas de respirar durante más de 10 segundos mientras duermes. El episodio va seguido de un resoplido o jadeo cuando empiezas a respirar de nuevo. Aunque la apnea del sueño es menos común que roncar.
Adopta un estilo de vida saludable y atlético para desarrollar un buen tono muscular y perder peso. Evita los tranquilizantes, los somníferos, los antihistamínicos y el alcohol antes de acostarte. Establece patrones de sueño regulares y duerme de lado, aconseja la Fundación Nacional del Sueño.
Remedios caseros: 1. La miel
Es un excelente expectorante natural, elimina las flemas y es útil para controlar las infecciones en la garganta y disminuir su irritación, un factor que puede estar causando los ronquidos. Haz gárgaras con una infusión tibia de hojas de frambuesa y dos cucharadas de miel en media taza de agua.
2. Menta y Eucalitpto
Conocidos por sus poderes expectorantes, abren las vías respiratorias y suavizan la garganta. Una mezcla efectiva es tomar aceites esenciales, mezclarlos en partes iguales con agua y rociar la cabecera de la cama antes de acostarte. También se pueden comprar en hojas y hacer inhalaciones de vapor.
3. La cebolla
Un remedio de las abuelas que tal vez te puede ayudar a aliviarlos. La cebolla es un descongestivo natural, y la obstrucción de las vías respiratorias es una de las causas del ronquido. Debes cortarla por la mitad y espolvorear sal sobre ella. Luego debes dejarla en un plato en la mesa de luz.
4. Aceite de oliva
Anímate a esta pócima anti-ronquidos: mezcla un vaso de aceite de oliva y 50 gramos de ruda en un recipiente hermético. Deja macerar tapado durante 2 semanas, cuela y guarda en un recipiente oscuro. Aplica antes de dormir, sobre las aletas de la nariz, el cuello y la nuca.
5. Inhalador casero
Otro remedio sencillo es preparar una solución salina con una taza de agua a temperatura ambiente, media cucharadita de sal y una pizca de bicarbonato de sodio. Tenerla a mano y aplicar un chorrito en la nariz antes de acostarte: si roncas por tener la nariz tapada, esta idea puede funcionar.