JONAH HILL Y MILES TELLER ESTAFAN AL PENTÁGONO EN 'AMIGOS DE ARMAS'
La comedia muestra de nueva cuenta que las películas biográficas no deben estar encasilladas al drama, y lo hace con Amigos de Armas, basada en un reportaje de la revista Rolling Stone escrito por Guy Lawson, sobre Efraim Diveroli y David Packouz, dos amigos que ganaron más de 200 millones de dólares por vender armas a Estados Unidos.
La idea de Efraim Diveroli (Jonah Hill) y David Packouz (Miles Teller) al principio era muy buena: comprar armas a China y venderla a Estados Unidos por un "alto" precio, el problema era que el país asiático está embargado, algo que por ser unos "veinteañeros" no sabían.
Al puro estilo de Pain & Gain, Amigos de Armas sigue a estos dos borrachos, drogadictos, de lo peor, en su búsqueda por hacer dinero, de la mano del director Todd Phillips a quien le debemos ¿Qué Pasó Ayer? y Todo Un Parto, y en entrevista habla sobre su gusto por contar cintas que hablan de personas que han tomado terribles decisiones.
La belleza de Amigos de Armas, además de Miles Teller, es que nos enfrenta a una realidad muy cruda, pero de forma tan divertida que supera toda ficción, y es que ver a dos personas tratando de estafar literalmente al gobierno americano es sin duda la más grande de las estupideces, sobre todo porque durante muchos años les funcionó.
"Me encanta hacer películas de malas decisiones, y está es la mejor de todas las historias, sobre dos tipos haciendo elecciones terribles en sus vidas y llevando todo a un punto muy alto y de no retorno", confía Todd a una publicación.