Nadal ganó, pero su rodilla no está bien
Corría el último set y parecía que Nadal, una vez más, dejaría a David Ferrer con la amargura de una derrota. De hecho, eso sucedió, pero el mallorquín tuvo un momento de mucha angustia cuando intentó devolver una fuerte derecha de su rival.
Llegó a contestar el tiro, pero cuando buscó retomar la mitad de cancha dejó caer su raqueta de la mano y se tomó la cara. Parecía que algo lo había molestado en un ojo, pero era la rodilla, otra vez.
En la imagen quedó claro que Nadal sigue con problemas en esa zona y aunque esta vez un Ferrer ya quebrado no pudo comprometer su victoria (estaban 4-0 para Nadal en el tercer set cuando sintió la molestia), dejó serias dudas sobre cual será su oportunidad de defender los puntos que ganó el año pasado en la gira de polvo de ladrillo europea.
Roland Garros, su título más preciado, será el gran examen, por lo que habrá que ver qué tanto decide arriesgar su físico antes de París.