WTF! Una madre bloguera es acusada por envenenar a su hijo de cinco años para llamar la antención de sus lectores
Lacey Spears fue encontrada culpable de asesinato de segundo grado por el jurado de un suburbio de Nueva York, por haber envenado a su hijo con grandes cantidades de sal que su cuerpo no estaba capacitado para procesar, causándole la muerte.
Su nombre era Garnett Paul Spears y fue la víctima de la inconciencia de su madre bloguera, quien por querer llamar la atención de sus seguidores, terminó con la vida de su hijo.
La defensa presentó a Spears como una madre cuidadosa y que amaba a su niño, pero los demandantes revelaron la atención que la enfermedad de Garnett trajo a la vida de su madre. Spears fue vista dos veces en video llevando a Garnett al baño con un tubo conector mostrando cómo el chico sufría después de ello.
“El motivo es extraño, es escalofriante, pero existe”, dijo la asistente del abogado del distrito, Patricia Murphy, en los argumentos de cierre del caso. “Aparentemente ella buscaba la atención de su familia, amigos, compañeros de trabajo y particularmente la de los médicos”.
La asistente sugirió que la madre de 27 años, eventualmente mató al niño porque temía que él dijera a la gente que su madre lo estaba enfermando. Sus acciones no fueron “nada diferentes a las de una tortura”, dijo.
La sentencia de Spears puede ir de 15 años a cadena perpetua.
Varios doctores testificaron que no había una explicación médica para el alto nivel de sodio que llevó a Garnett a la muerte.
Pero el abogado de la defensa, Stephen Riebling, dijo que no hay evidencia directa de un crimen y demostró, gracias a varios testigos, que Spears estaba devastada por la muerte de su hijo. También alegó que el hospital había editado los videos, eliminando una escena en donde Spears le pone doble medias a Garnett.
“Si ella estaba planeando matarlo, ¿por qué le importaría si tenía los pies frios?” dijo Riebling al jurado. Agregando que el hospital había sido negligente dejando que el niño se deshidratara. Algo que Murphy llamó, “simplemente ridículo”.
La evidencia incluyó dos bolsas de comida encontradas en el apartamento de Spears que tenían altos niveles de sal, incluyendo otra que ella pidió a un amigo que escondiera. Una persona testificó que una de las bolsas tenía 69 paquetes de sal de McDonald’s.
Otra evidencia fueron sus publicaciones en las redes sociales y varias búsquedas en Google del peligro que representa la sal en niños.
Spears vivía en un suburbio de Nueva York junto a su hijo y después de su muerte regresó a su ciudad de origen en Kentucky, dónde fue arrestada.
Aunque no ha sido comprobado y tampoco fue mencionado durante el juicio, varios expertos creen que Spears puede sufrir de un desórden conocido como Munchausen, por el cual una persona puede hacerle daño a un niño para ganar la simpatía de otros.
Qué lamentable es que un niño sufra las concecuencias de los errores de los adultos…