Habla con el hombre que gana 1.000 dólares a la hora

Anthony Green es un profesor que imparte clases particulares a los niños ricos a través de Skype. Cobra 1.500 dólares por cada sesión individual de noventa minutos y lo hace desde una mesa de cocina de su casa en Manhattan.
Este profesor web se dedica a esta actividad de siete y media de la mañana a cinco o seis de la tarde. Antes de comenzar su rutina, suele bajar a la calle lanzar el guante a un café y a una tortilla de un sitio con el que se le hace la boca agua.
El mínimo de clases que recomienda a sus alumnos son catorce, cifra reservada para casos muy excepcionales. Normalmente, el número de sesiones es un tanto mayor. Con él, los buenos resultados de sus clientes parecen estar garantizados.
Green deja constancia en su página web de que sus alumnos obtienen unos resultados excelentes en las distintas pruebas de acceso. “Más alta que con cualquier tutor, clase o programa en el país”, declara el genio con total seguridad.
El profesor particular revela que la media de sus alumnos 430 puntos en el examen del SAT y 7,8 en el de la ACT.
